Ante un estadio casi vacío, los Gallos Blancos de Querétaro lograron sacar un punto ante la franja del Puebla con un gol de último minuto.

El partido fue una pesadilla para los locales. Con Guillermo Allison nuevamente defendiendo el arco del Querétaro, parecía que los de casa tendrían la oportunidad de ganar los tres puntos. La historia del encuentro fue muy diferente y el arbitraje nuevamente dio de qué hablar con decisiones discutibles.

Apenas habían transcurrido ocho minutos de juego cuando Oscar Manzanares vio la tarjeta roja y dejó a los plumíferos con 10 elementos.

Al minuto 10, Diego de Buen ganó la posición y con un cabezazo anotó el primer tanto para los poblanos. Escamilla aflojó la marca y permitió al de la franja rematar con comodidad. Desde entonces, los dirigidos por Mauro Gerk intentaron recuperar el balón y el orden, pero sin poder convertir las jugadas en gol.

En la segunda mitad los de casa generaron jugadas de peligro, pero la ausencia de un delantero preciso y contundente no permitió que las oportunidades terminaran en gol.

En la recta final, y con seis minutos añadidos al reloj, el Querétaro se fue al ataque. Fue hasta el 95 que Rafa Escamilla logró empatar el marcador. La jugada nació de un tiro de esquina que remató el de Gallos para sorprender al portero de la franja.

Gallos llegó a 8 puntos, con un partido pendiente y descendió a la posición 14 de la tabla general.